sábado, 13 de marzo de 2010

Eugenio Montale (Genova 1896, Milan 1981)



De Xenia I

4

Habíamos estudiado un silbido
para el más allá, una señal de reconocimiento.
Lo ensayo con la esperanza
de que todos estemos muertos sin saberlo.

traducido por Ricardo Herrera

Avevamo studiato per l'aldilà
un fischio, un segno di riconoscimento.
Mi provo a modularlo nella speranza
che tutti siamo già morti senza saperlo.





de Xenia II

5

Bajé, dándote el brazo, por lo menos un millón de escaleras,
y ahora que no estás hay un vacío en cada escalón.
Así y todo fue breve nuestro largo viaje.
El mío dura todavía. Ya no necesito
hacer combinaciones, reservas,
someterme a las trampas, a las humillaciones de quien cree
que la realidad es lo que se ve.

Bajé millones de escaleras dándote el brazo
no porque creyese que cuatro ojos puedan ver más.
Con vos las bajé porque sabía que de las nuestras
las únicas pupilas reales, pese a que estaban tan obnubiladas,
eran las tuyas.

Traducción de Ricardo Herrera

He bajado al menos
un millón de escaleras tomado de tu brazo
y ahora que no estás cada escalón es un vacío.
Nuestro largo viaje también fue así de breve.
El mío aún continúa, pero ya no necesito
las combinaciones, la reserva de asientos,
las astucias, las afrentas de quien cree
que la realidad es lo que vemos.
He bajado millones de escaleras tomado de tu brazo
y no porque cuatro ojos puedan ver más que dos.
Las bajé contigo porque sabía que de nosotros dos
las únicas pupilas verdaderas, aunque nubladas,
eran las tuyas.

Traducción de Gianni Siccardi

Ho sceso, dandoti il braccio, almeno un milione di scale
e ora che non ci sei è il vuoto ad ogni gradino.
Anche così è stato breve il nostro lungo viaggio.
Il mio dura tuttora, né più mi occorrono
le coincidenze, le prenotazioni,
le trappole, gli scorni di chi crede
che la realtà sia quella che si vede.

Ho sceso milioni di scale dandoti il braccio
non già perché con quattr'occhi forse si vede di più.
Con te le ho scese perché sapevo che di noi due
le sole vere pupille, sebbene tanto offuscate,
erano le tue.

El vacio


Ha desaparecido hasta el vacío
en que en un tiempo podíamos refugiarnos.
Ahora sabemos que también el aire
es una materia que pesa sobre nosotros.
Una materia inmaterial, lo peor
que podía tocarnos.
No está bastante lleno porque debemos
poblarlo de actos y de movimientos
para poder decir que le pertenecemos
y ni muertos habremos de escaparle.
Abarrotar de objetos lo que es
un solo Objeto por definición
sin que a él le importe nada, oh infame
comedia. ¡Y con qué celo la representamos!

(Versión de Horacio Armani)

Il vuoto

É sparito anche il vuoto
dove un lempo si poteva rifugiarsi.
Ora sappiamo che anche l'aria
é una materia che grava su di noi
Una materia immateriale, il peggio
che poteva toccarci.
Non é pieno abbastanza perché dobbiamo
popolarlo di fatti, di movimenti
per poter dire che gli apparteniamo
e mai gli sfuggiremo anche se morti.
Inzeppare di oggetti quello ch'è
il solo Oggetto per definizione
senza che a lui ne importi niente o turpe
commedia.
E con che zelo la recitiamo!


Quién sabe si algún día...


Quién sabe si algún día tiraremos las máscaras
que sin saberlo llevamos sobre el rostro.
Por eso es tan difícil identificar
a los hombres que encontramos.
Quizá entre tantos, entre los millones, hay
uno en el que rostro y máscara coinciden
y sólo él podría decir la palabra
que esperamos desde siempre. Pero es probable
que él no conozca su privilegio.
Quien lo ha conocido, si hubo alguno,
pagó su don con tartamudez o algo peor.
No valía la pena encontrarlo. Su nombre
fue siempre impronunciable por causas
no sólo de fonética. La ciencia
tiene, ciertamente, otras cosas que hacer,
o no hacer.

Siria

Decían en la Antigüedad que la poesía
es una escalera a Dios.
Tal vez no lo sea cuando me lees ahora. Pero lo supe el día
que por ti volví a encontrar mi voz, disuelto
en un rebaño de nubes y de cabras revoltosas
que desde un risco acababan con las hojas
del ciruelo y de las fresas,
los rostros demacrados de la luna y del sol se fundían,
el motor estaba averiado y una flecha de sangre
sobre una roca señalaba
el camino de Alepo.

De La Tempestad y demas 1956

La poesía, decían los antiguos,
es escalera que conduce a Dios.
Tal vez no sea así cuando me lees,
pero lo supe el día en que por ti
recuperé la voz, abierto
a una grey de nubes y de cabras
que irrumpió sobre un risco a roer las babas
de espinillos y zarzas, se fundían
los rostros demacrados del sol y de la luna,
el motor no arrancaba y una flecha
de sangre en una piedra señalaba
el camino hacia Alepo.
teaduccion de Ricardo Herrera

Siria

Dicevano gli Antichi che la poesia
è scala a Dio.
Forse non è così se mi leggi. Ma il giorno io
lo seppi che ritrovai per te la voce, sciolto
in un gregge di nuvoli e di capre
dirompenti da un greppo a brucar bave
di pruno e di falasco, e i volti scarni della luna
e del sole si fondevano, il motore era guasto
ed una freccia di sangue
su un macigno segnalava
la via di Aleppo.

de La bufera e altro, 1956

Siria

The ancients always said that poetry
is a stairway to God. Perhaps this is not so
if you read mine. But the day I knew it
was the day I found my voice again for you, let loose
in a flock of clouds and goats
broken free from their corral to nibble at the foam
of blackthorn and marshgrass, the lean faces
of the moon and sun confounded,
the car broke down and an arrow
of blood on sandstone indicated
the road to Aleppo."

Traslate William Carlos Williams


El Eufrates

Vi el Éufrates en sueños,
su somnoliento cauce entre zambullidas
de roedores y anchos remansos en bahías
de barro orladas de telarañas vegetales.
Quién sabe qué habrás visto tú en treinta años
(o cien, quizá), si es que queda algo de ti.
No me repitas que hasta en un palillo,
una migaja o en lo más ínfimo puede caber el todo.
Es lo que yo pensaba cuando existía el mundo,
pero mi pensamiento desvaría, se adhiere a lo que puede
para saber que sigue vivo. Él mismo no lo sabe,
sigue muchos caminos y a menudo
se busca en el atlas para darse un nombre.



L'Eufrate


Ho visto in sogno l'Eufrate,
il suo decorso somnolento tra
tonfi di roditore e larghi indugi in sacche
di fango orlatte di ragnateli arborei.
Chissà che cosa avrai visto tu in trent'anni
(magari cento) ammeso che sia qualcos di te.
Non ripetermi que anche uno stuzzicadenti,
anche una briciola o un niente può contenere il tutto.
È quello che pensavo quando esisteva il mondo
ma il mio pensiero svaria, si appiccia dove può
per dirsi che non s'è spento. Lui stesso no se sa nulla,
la vie che segue son tante e a volte
per darsi ancora un nome si cerca sull' atlante.


Eugenio Montale, "Satura", Poesía completa, traducción de Fabio Morábito. Galaxia Gutenberg-Círculo de Lectores, Barcelona, 2006.


La máscara, su envés.
Quién sabe si algún día tiraremos las máscaras
que sin saberlo llevamos sobre el rostro.
Por eso es tan difícil identificar
a los hombres que encontramos.
Quizá entre tantos, entre los millones, hay
uno en el que rostro y máscara coinciden
y sólo él podría decir la palabra
que esperamos desde siempre.
Pero es probable
que él no conozca su privilegio.
Quien lo ha conocido, si hubo alguno,
pagó su don con tartamudez o algo peor.
No valía la pena encontrarlo.
Su nombre fue siempre impronunciable
por causas no sólo de fonética.
La ciencia tiene, ciertamente
otras cosas que hacer, o no hacer.

GÖTTERDÄMMERUNG

 

Se dice que el crepúsculo de los dioses

va a dar comienzo. Es un error.

Los comienzos son siempre incognoscibles;

si alguna cosa se comprueba, antes ha sido

agujereada por un alfiler.

El crepúsculo se inició cuando el hombre

se sintió más digno que un topo o un grillo.

El infierno que se reitera es apenas el ensayo

de un “estreno absoluto” postergado hace tiempo

porque el director está ocupado, está enfermo, escondido

quién sabe dónde y nadie puede reemplazarlo.

 

Eugenio Montale (Génova, 1896 - Milán, 1981)

Fuente: Antología, Eugenio Montale. Selección, traducción, prólogo y notas por Horacio Armani, 

 

Si legge che il crepuscolo degli Dei
stia per incominciare. È un errore.
Gli inizi sono sempre inconoscibili,
se si accerta un qualcosa, quello è già
trafitto dallo spillo.
Il crepuscolo è nato quando l’uomo
si è creduto più degno di una talpa o di un grillo.
L’inferno che si ripete è appena l’anteprova
di una ‘prima assoluta’ da tempo rimandata
perché il regista è occupato, è malato, imbucato
chissà dove e nessuno può sostituirlo
.


Salvatore Quasimodo (Siracusa 1901, Napoles 1968)




Color de lluvia y de hierro


Decías: muerte silencio soledad;
como amor, vida. Palabras
de nuestras provisorias imágenes.
Y el viento se ha alzado leve cada mañana
y el tiempo color de lluvia y de hierro
ha pasado sobre las piedras,
sobre nuestro cerrado zumbido de malditos.
La verdad todavía está lejos.
Y dime, hombre quebrantado en la cruz,
y tú, el de las manos hinchadas de sangre,
¿qué le contestaré a los que preguntan?
Ahora, ahora: antes de que más silencio
entre en los ojos, antes de que más viento
se alce y más herrumbre florezca.

traducido por Narváez, Carlos López


Colore di pioggia e di ferro

Dicevi:morte, silenzio, solitudine;
come amore, vita. Parole
delle nostre provvisorie immagini.
E il vento s'è levato leggero ogni mattina
e il tempo colore di pioggia e di ferro
è passato sulle pietre,
sul nostro chiuso ronzio di maledetti.
Ancora la verità è lontana.
E dimmi, uomo spaccato sulla croce,
e tu dalle mani grosse di sangue,
come risponderò a quelli che domandano?
Ora, ora: prima che altro silenzio
entri negli occhi, prima che altro vento
salga e altra ruggine fiorisca.





Ya vuela la flor magra


No sabré nada de mi vida,
oscura monótona sangre.

No sabré a quién amaba, a quién amo,
ahora que estrecho, reducido a mis miembros,
en el dañado viento de marzo
enumero los males de los días descifrados.

Ya vuela la flor magra
desde las ramas. Y yo espero
la paciencia de su vuelo irrevocable.

en “Y enseguida anochece”, Orbis, Barcelona, 1985. Trad. Carlo Frabetti

Già vola il fiore magro.

Non sapró nulla della mia vita,
oscuro monotono sangue.

Non sapró chi amavo, chi amo,
ora che qui stretto, ridotto alle mie membra,
nel guasto vento di marzo
enumero i mali dei giorni decifrati.

Già vola el fiore magro
dei rami. Ed io attendo
la pazienza del suo volo irrevocabile.

Y enseguida anochece

Cada uno está solo sobre el corazón de la tierra
traspasado por un rayo de sol:
y enseguida anochece.

Ed è Subito Sera

Ognuno sta solo sul cuor della terra
trafitto da un raggio di sole:
ed è subito sera.

Imitación de la alegría

Donde los árboles aún
más desolada hacen la tarde,
al tiempo que indolente
se ha desvanecido tu último paso,
aparece la flor
en los tilos y persiste en su suerte.

Buscas sentido para tus afectos,
encuentras el silencio en tu vida.
Otro destino me revela
el tiempo reflejado. Me pesa
como la muerte, la belleza
que en otros rostros brilla.
He perdido toda cosa inocente,
incluso en esta voz, que sobrevive
para imitar la alegría.



Imitazione della gioia


Dove gli alberi ancora
abbandonata piú fanno la sera,
come indolente
è svanito l'ultimo tuo passo,
che appare appena il fiore
sui tigli e insiste alla sua sorte.

Una ragione cerchi agli affetti,
provi il silenzio nella tua vita.
Altra ventura a me rivela
il tempo specchiato. Addolora
come la morte, bellezza ormai
in altri volti fulminea.
Perduto ho ogni cosa innocente,
anche in questa voce, superstite
a imitare la gioia.


Auschwitz

 

Allá abajo, amor, en Auschwitz, lejos

del Vístula, a lo largo de la llanura nórdica.

en un campo de muerte: fría, fúnebre,

la lluvia sobre la herrumbre de los postes

y los revoltijos de alambre de las cercas:

ni árboles ni pájaros en el aire gris

o en nuestro pensamiento, sino inercia

y dolor que la memoria abandona

a su silencio sin ironía o ira.

Tú no quieres elegías, lirismos: sólo

razones de nuestra suerte, aquí,

tú, tierna a los obstáculos de la mente,

insegura ante una presencia

clara de vida. Y la vida está aquí,

en cada negación que certeza parece:

aquí oiremos llorar al ángel, al monstruo,

nuestras horas futuras

golpear el más allá, que aquí está, eterno

y en movimiento, no en una imagen

ensoñada, de posible piedad.

Y aquí la metamorfosis, aquí los mitos.

Sin nombres de símbolos o de un dios,

son crónicas, lugares de la tierra,

son Auschwitz, amor. ¡De qué manera súbita

se mutaron en sombrío humo

los amados cuerpos de Alfeo y Aretusa!

De aquel infierno que se abría

con la blanca inscripción “El trabajo os hará libres”,

salió con continuidad el humo

de miles de mujeres empujadas afuera,

al alba de los tugurios contra el muro

del tiro al blanco o ahogadas gritando

misericordia al agua con sus bocas

de esqueleto bajo las lluvias de gas.

Tú las encontrarás, soldado, en tu

historia bajo formas de ríos, de animales,

¿o también eres tú ceniza de Auschwitz,

medalla de silencio?

Quedan largas trenzas encerradas en urnas

de cristal aún ceñidas por amuletos

e infinitas sombras de pequeños zapatos

y bufandas de hebreos, son reliquias

de un tiempo de sabiduría, de sapiencia

del hombre hecho a la medida de las armas,

son los mitos, nuestras metamorfosis.

Sobre los espacios en los que el amor y llanto

y piedad se marchitaron, bajo la lluvia,

allá abajo, se rebelaba un no dentro de nosotros,

un no a la muerte, muerta en Auschwitz,

para no repetirme desde aquella fosa

de cenizas, la muerte.

 


Auschwitz

Laggiu’, ad Auschwitz, lontano dalla Vistola,
amore, lungo la pianura nordica,
in un campo di morte: fredda, funebre,
la pioggia sulla ruggine dei pali
e i grovigli di ferro dei recinti:
e non albero o uccelli nell’aria grigia
o su dal nostro pensiero, ma inerzia
e dolore che la memoria lascia
al suo silenzio senza ironia o ira.

Tu non vuoi elegie, idilli: solo
ragioni della nostra sorte, qui,
tu, tenera ai contrasti della mente,
incerta a una presenza
chiara della vita. E la vita e’ qui,
in ogni no che pare una certezza:
qui udremo piangere l’angelo il mostro
le nostre ore future
battere l’al di la’, che e’ qui, in eterno
e in movimento, non in un’immagine
di sogni, di possibile pieta’.
E qui le metamorfosi, qui i miti.
Senza nome di simboli o d’un dio,
sono cronaca, luoghi della terra,
sono Auschwitz, amore. Come subito
si muto’ in fumo d’ombra
il caro corpo d’Alfeo e d’Aretusa!

Da quell’inferno aperto da una scritta
bianca: «Il lavoro vi rendera’ liberi»
usci’ continuo il fumo
di migliaia di donne spinte fuori
all’alba dai canili contro il muro
del tiro a segno o soffocate urlando
misericordia all’acqua con la bocca
di scheletro sotto le docce a gas.
Le troverai tu, soldato, nella tua
storia in forme di fiumi, d’animali,
o sei tu pure cenere d’Auschwitz,
medaglia di silenzio?
Restano lunghe trecce chiuse in urne
di vetro ancora strette da amuleti
e ombre infinite di piccole scarpe
e di sciarpe d’ebrei: sono reliquie
d’un tempo di saggezza, di sapienza
dell’uomo che si fa misura d’armi,
sono i miti, le nostre metamorfosi.

Sulle distese dove amore e pianto
marcirono e pieta’, sotto la pioggia,
laggiu’, batteva un no dentro di noi,
un no alla morte, morta ad Auschwitz,
per non ripetere, da quella buca
di cenere, la morte.

En «Il falso y vero verde» – «Quando cadderogli alberi e le mura» – 1949 – 1955

Vincenzo Cardarelli (Corneto Tarquinia, 1887–Roma, 1959)





A la muerte

Morir sí,
no ser agredidos por la muerte.
Morir persuadidos
de que semejante viaje será el mejor.
Y en el último instante estar alegres
como cuando contamos los minutos
en el reloj de la estación
y cada uno es como un siglo.
Puesto que la muerte es la esposa fiel
que sustituye a la amante traidora
no deseamos recibirla por intrusa,
ni huir con ella.
¡Demasiadas veces partimos
sin despedida!
A punto de cruzar
en un instante el tiempo,
cuando la memoria
nuestra se despierta,
déjanos, oh muerte, decir adiós al mundo,
concédenos todavía una demora.
Que el decisivo paso no sea
precipitado.
Al pensar en la muerte repentina
la sangre se me hiela.
Muerte, no me atraparás,
más anunciate de lejos
y tómame por amigo
como la última de mis costumbres



 Traduccion Hernán Isnardi tomado del blog
 http://www.lamaquinadeltiempo.com/poemas/cardarelli1.htm

A la Muerte

Morir, sí,
no ser avasallados por la muerte.
Persuadidos morir
que un semejante viaje sea el mejor.
Y en ese último instante estar alegres
como cuando se cuentan los minutos
en el reloj de la estación
y cada uno vale un siglo.
Porque la muerte es esa esposa fiel
que suplanta a la amante traidora,
no la queremos recibir
como a una intrusa, ni escapar con ella.
¡Tantas veces partimos
sin una despedida!
Cuando llegue la hora de cruzar
en un instante el tiempo,
cuando se esfumará
aun la memoria de nosotros mismos,
oh Muerte, déjanos decir adiós
al mundo,
concédenos quedarnos todavía
un poco más.
Que el desmedido paso
no sea precipitado.
Se me hiela la sangre
cuando pienso en la muerte repentina.
Muerte, no me arrebates,
anúnciate de lejos
y tómame amistosa
como uno de mis hábitos, el último.

Versión de Pablo  Anadon.



Alla Morte

Morire sì,
non essere aggrediti dalla morte.
Morire persuasi
che un siffatto viaggio sia il migliore.
E in quell'ultimo istante essere allegri
come quando si contano i minuti
dell'orologio della stazione
e ognuno vale un secolo.
Poi che la morte è la sposa fedele
che subentra all'amante traditrice,
non vogliamo riceverla da intrusa,
né fuggire con lei.
Troppe volte partimmo
senza commiato!
Sul punto di varcare
in un attimo il tempo,
quando pur la memoria
di noi s'involerà,
lasciaci, o Morte, dire al mondo addio,
concedici ancora un indugio.
L'immane passo non sia
precipitoso.
Al pensier della morte repentina
il sangue mi si gela.
Morte, non mi ghermire,
ma da lontano annunciati
e da amica mi prendi
come l'estrema delle mie abitudini.



  
Pasado

Los recuerdos, esas sombras tan largas
de nuestro cuerpo,
ese residuo de muerte
que dejamos viviendo,
los lúgubres y durables recuerdos,
están aquí surgiendo:
melancólicos y mudos
fantasmas agitados por un fúnebre viento.
Y no eres más que un recuerdo.
Has transcurrido en mi memoria.
Ahora sí puedo decir
que me perteneces
y que algo entre nosotros ha ocurrido
irrevocablemente.
¡Todo acabó tan rápido!
Precipitado y leve
el tiempo nos dio alcance.
De fugaces instantes hilvanó un cuento
cerrado y triste.
Debíamos saber ya que el amor
quema la vida y hace huir al tiempo.

Traduccion de Antonio Aliberti


Passato


I ricordi, queste ombre troppo lunghe
del nostro breve corpo,
questo strascico di morte
che noi lasciamo vivendo
i lugubri e durevoli ricordi,
eccoli già apparire:
melanconici e muti
fantasmi agitati da un vento funebre.
E tu non sei più che un ricordo.
Sei trapassata nella mia memoria.
Ora sì, posso dire che
che m'appartieni
e qualche cosa fra di noi è accaduto
irrevocabilmente.
Tutto finì, così rapito!
Precipitoso e lieve
il tempo ci raggiunse.
Di fuggevoli istanti ordì una storia
ben chiusa e triste.
Dovevamo saperlo che l'amore
brucia la vita e fa volare il tempo.

Insomnio

A veces me parece verlo el Sueño
monstruo enorme, impalpable,
que sobre mi está dispuesto a devorarme,
y en ese mismo instante soy su presa.
Qué tremenda y desgarradora guerra
es aquella que yo conduzco
con él frecuentemente.
Al sueño, me refiero.Y delirando paso
las horas que son suyas.
Larva inquieta, durmiente, que camina
y va soñando y cree estar despierto.

Versión de Antonio Colinas


Insonnia

Talvolta a me par di vederlo il Sonno,
Mostro enorme, impalpabile,
Starmi sopra già pronto ad inghiottirmi,
E son sua preda in quello stesso istante.
Quale tremenda e sciagurata guerra
È quella ch’io piú spesso
Con lui vo conducendo.
Col Sonno dico. E delirando fuggo
L’ore che gli apartengono.
Larva inquieta, dormente che cammina
E va sognando e stima d’esser desto.


Memento

La idea que tenemos de cada cosa
es motivo para que todo nos desilusione
Mala cosa es soñar lo verdadero,
proyectar lo ignoto.
El mal esta en nuestra fantasía
ya que , perfecto y admirable , se finge
cada acontecimiento;
está en la ansiosa espera
del día dichoso,
del afortunado encuentro
que luego nos desengaña.
Ansiaban la fiesta y ha aquí que han llegado.
Las horas pasan fugaces y melancólicas
como para un niño
que estando vestido de nuevo nadie acaricia.
Pero a veces el bien obliga,
amenaza con sofocarnos.
Pero el mal es continuo, goteante.
El es la infracción, el mal es la norma
en nuestra existencia.

Traduccion de Antonio Colinas

Memento

L'idea che ci facciamo d' ogni cosa
è cagione che tutto ci deluda.
E' mal sognare il vero,
architettar l'ignoto.
Il male è nella nostra fantasia
che perfetto e mirabile si finge
ogni evento,
è nell'ansiosa attesa
del giorno beato,
del fortunato incontro
che poi ci disinganna.
Sospiravam la festa. Ecco è venuta.
Passan l'ore fugaci e malinconiche
come per il fanciullo
che niun vezzeggia ed è vestito a nuovo.
Il bene talvolta fa ressa,
si soffocarci minaccia.
Ma il male è continuo, stillante.
Il bene è l'infrazione, il male è norma
nella nostra esistenza.

Abril

Cuántas palabras cansadas
Me vienen a la mente
En este día lluvioso de abril
Donde el aire es como nube
que se deshace
o flor que se desflora.
Dentro de un velo de lluvia
Todo está vestido de nuevo.
La húmeda y querida tierra
Me hiere y me disuelve.
Si tus ojos son palúdicos y negros
Como el infierno,
Mi dolor es fresco
Como un arroyo.

Versión de Angel Faretta

April

Quante parole stanche
Mi vengono alla mente
In questo giorno pioioso d’aprile
Che l’aria è come nube che si spappola
O fior che si disfiora.
Dentro un velo di pioggia
Tutto è vestito a nuovo.
La umida e cara terra
Mi punge e mi discioglie.
Se gli occhi tuoi son paludosi e neri
Il mio dolore è fresco
Come un ruscello.