Lo que estaba por decir
Lo que
estaba por decir
no es para
los jóvenes
imbuidos del
despliegue
de sus
recursos.
Ni para el
joven
que deambula
por un valle
de callados
deseos.
No es para
los hombres
que cabalgan
una causa
con la
mirada puesta en las conquistas
que se
marchitan
antes de su
consagración.
Ni para
aquellos
que dan
porque temen.
Lo que
estaba por decir
no es para
valientes,
que desde
hace mucho conocen
los peligros
de la seguridad;
ni para los
tímidos,
acorralados
tras su
lujuria.
No es para
los fuertes
obstaculizados
por una carga,
donde sus
recursos
de nada sirven.
No para los
que engendran
distantes
del amor,
inquietos
por sus sueños.
Lo que
estaba por decir
es mejor que
no lo diga.
Balance final
Debieras estudiar contabilidad
te ayudaría a evaluar
ganancias y pérdidas, deudas y
créditos,
con un balance final
que revelara el estado auténtico
de tu estructura
Es harto inútil
lamentar tus desdichas
desordenadamente
y a la vez despreciar las alegrías
que aguardan tu reconocimiento
para lo que no estás preparado.
Debes reordenarte;
reponer tus fragmentos
donde en verdad pertenecen;
removerles el verdín,
y luego aspirar profundamente
la belleza que no has advertido.